Suzuki Swift Sport: el hot hatch divertido y asequible que necesitas conocer

Introducción

El Suzuki Swift Sport ha sido durante mucho tiempo un secreto bien guardado entre los entusiastas de los hot hatch. No es el automóvil más potente de su segmento, pero es ágil, divertido de conducir y ofrece una experiencia emocionante por una fracción del precio de sus competidores. Con este modelo de tercera generación, Suzuki pretende ampliar el atractivo ofreciendo un rendimiento mejorado, menores costes de funcionamiento y un manejo aún más preciso. Analicemos por qué el Swift Sport merece más atención.

Emociones de conducción de la vieja escuela con un toque moderno

Los hot hatch alguna vez tuvieron como objetivo el simple placer de conducir: motores livianos, de aspiración natural y manejo ágil. Esa fórmula ha evolucionado, y muchos hot hatch modernos dependen de características de alta tecnología como sistemas electrónicos de estabilidad, tracción en las cuatro ruedas y motores turboalimentados. Pero el Swift Sport de Suzuki se mantiene fiel a sus raíces y ofrece una alternativa refrescante en un segmento lleno de competidores de alta potencia y alto costo.
Este Swift Sport no se trata de velocidad absoluta ni de artilugios excesivos. Más bien, se trata de equilibrio y, gracias a su peso liviano y dimensiones compactas, ofrece una conducción estimulante sin la necesidad de una potencia enorme. El motor de 1.6 litros produce 134 caballos de fuerza de frenado, lo que puede no parecer mucho, pero combinado con su peso ligero de poco más de una tonelada, es suficiente para mantener el ritmo. El Swift Sport pasa de 0 a 60 mph en 8,7 segundos y alcanza una velocidad máxima de 121 mph, no vertiginosa, pero sí suficiente para que sea divertido de conducir.

Rendimiento, todo es cuestión de experiencia

La verdadera magia del Suzuki Swift Sport reside en cómo se siente en la carretera. Este no es un coche diseñado para velocidad en línea recta. Está diseñado para carreteras secundarias sinuosas donde brilla el manejo rápido y receptivo. La dirección es aguda y directa, un 20% más sensible que su predecesor, y la suspensión se ha endurecido para tomar mejor las curvas. Ya seas un conductor experimentado o un principiante, el Swift Sport te resultará atractivo e inspirará confianza.
Suzuki ha conservado la caja de cambios manual para este modelo y es un placer utilizarla. La transmisión de seis velocidades se siente resbaladiza y lo alienta a mantener el motor en su punto óptimo. Tienes que accionar la caja de cambios y acelerar el motor para aprovecharlo al máximo, pero eso es parte del atractivo. Este no es un automóvil que hace todo por usted: recompensa la participación del conductor.

Lo suficientemente práctico para el uso diario

Si bien el Swift Sport tiene como objetivo la diversión, Suzuki no ha sacrificado la practicidad. El estilo de carrocería de tres puertas proporciona un espacio decente en la parte delantera, aunque los asientos traseros son más adecuados para viajes cortos o pasajeros más pequeños. El maletero ofrece 211 litros de espacio, que no es enorme pero es más de lo que encontrarás en rivales como el Fiat 500 Abarth o el Renault Twingo.
Para aquellos que utilizan el coche para viajes más largos, el Swift Sport ofrece una conducción sorprendentemente cómoda en autopista. A pesar de la suspensión más rígida, no se siente demasiado dura y la adición de una caja de cambios de seis velocidades hace que la conducción en carretera sea más relajante. El motor permanece refinado cuando no lo llevas al límite, lo que hace de este hot hatch una opción viable para el uso diario, no solo para la diversión del fin de semana.

Diseño sobrio pero deportivo

Visualmente, el Swift Sport logra el equilibrio adecuado entre agresividad deportiva y estilo discreto. El frontal está dominado por grandes faros de descarga de alta intensidad y un alerón delantero profundo. La parte trasera presenta elegantes luces combinadas y un sutil spoiler, todo ello sobre elegantes llantas de aleación de 17 pulgadas. Si bien no llama la atención como algunos de sus competidores, el Swift Sport parece un hot hatch capaz.
En el interior, la cabina está centrada en el conductor. El volante deportivo tapizado en cuero se siente muy bien en la mano y los asientos deportivos brindan un amplio soporte lateral para una conducción enérgica. Si bien es posible que los materiales del interior no coincidan con la sensación premium de modelos más caros como el Mini Cooper, son más que aceptables para un automóvil en este rango de precios. La lista de equipamiento estándar también es impresionante, con características como aire acondicionado, conectividad Bluetooth, entrada sin llave y un sistema estéreo de seis bocinas, todo incluido.

Asequibilidad sin concesiones

Uno de los mayores puntos de venta del Suzuki Swift Sport es su precio. Con un precio inicial de alrededor de £ 14,000, supera a muchos de sus rivales y ofrece más equipamiento y mejor rendimiento. Por ejemplo, un Vauxhall Corsa 1.4 SRI con sólo 100 CV cuesta unas 2.000 libras más, a pesar de ser más lento y menos atractivo de conducir. Otros competidores, como el Renault Twingo y el Fiat 500 Abarth, pueden ofrecer niveles similares de rendimiento, pero son más caros, más pequeños o menos prácticos.
En términos de costes de funcionamiento, el Swift Sport se mantiene firme. Suzuki ha conseguido recortar las emisiones de CO2 respecto al modelo anterior, reduciéndolas a 147 g/km. La economía de combustible también ha mejorado: el automóvil ahora alcanza 44,1 millas por galón en el ciclo combinado. Si bien no es el hot hatch con mayor eficiencia de combustible de su clase, es competitivo si se considera su rendimiento y la diversión que ofrece.

Un Hot Hatch bien equipado

A pesar de su modesto precio, el Swift Sport viene generosamente equipado. Las características estándar incluyen llantas de aleación de 17 pulgadas, faros automáticos, cristales de privacidad y asientos deportivos. En cuanto a la seguridad, Suzuki tampoco ha escatimado, con dos airbags frontales, laterales y de cortina, así como control electrónico de estabilidad y una bolsa para las rodillas del conductor, todo incluido. Incluso hay control de crucero, una adición inusual pero bienvenida en un hot hatch.
Para aquellos que priorizan la seguridad, el Swift Sport cumple. La asistencia electrónica de frenado y tracción garantiza que mantengas el control, incluso cuando llevas el coche al límite. Con un alto nivel de equipamiento y centrándose en la seguridad, el Swift Sport es tan práctico como divertido de conducir.

Conclusión

El Suzuki Swift Sport es una joya que a menudo se pasa por alto en el mundo de los hot hatch. Puede que no tenga la mayor potencia ni la mayor velocidad máxima, pero lo compensa con una agilidad ligera y una experiencia de conducción atractiva. Si se olvidó del Swift Sport o nunca lo consideró, se debe una prueba de manejo. Encontrará diversión GTI de la vieja escuela sin los inconvenientes de la vieja escuela y a un precio que lo hace accesible a un público más amplio.
Para aquellos que buscan un hatchback que brinde emociones sin gastar mucho dinero, el Suzuki Swift Sport es la elección perfecta. Es asequible, práctico y, lo más importante, es una maravilla conducirlo. Consulte esta revisión completa para profundizar en el Swift Sport: Suzuki Swift Sport 2011-2017 | ¿Deberías comprar uno?.

Publicaciones Similares